jueves, 12 de julio de 2012

Mis Palabras Finales...

No importa cuán vastos puedan parecer tus horizontes, siempre puedes expandirlos más aún. No importa cuánto hayas experimentado, aprendido o amado o vivido, siempre queda más por hacer. La vida es algo tan inmenso y sustancioso que nunca podrá ser superado. Cada día trae consigo un conjunto totalmente nuevo de posibilidades.

Cada momento te acerca nuevas opciones y oportunidades. Incluso los tiempos difíciles terminan agregando valor a tu vida. Vives en el medio de una vasta magnificencia. Los problemas del día a día no pueden compararse con las infinitas posibilidades disponibles para tI.

Jamás habrá escasez de ideas por explorar, o caminos a seguir, o cosas nuevas por aprender. Siempre habrá maneras en las cuales podrás marcar una verdadera diferencia positiva.

Tu vida importa y mucho. Tanto, que hasta es difícil siquiera empezar a apreciar el valor que realmente tiene. Vive ese valor, cada instante de cada día. Aprovéchalo al máximo. Sí, la vida tiene sus problemas. Así y todo, en general y en este preciso instante, es maravillosa. Y lo más maravilloso de todo, es que siempre puede ser aún mejor.

jueves, 5 de julio de 2012

El Poder de Tomarse de las Manos

Sentado en la playa un día de verano observaba como unos niños, jugaban en la arena. Estaban trabajando con esmero cerca del agua, en la construcción de un elaborado castillo con portones, torres, y pasajes internos. Cuando estaban acabando con el proyecto, una gran ola vino y les derrumbó la construcción, reduciéndola a un montículo de arena mojada.

Pensé que estallaría el llanto, agobiados por lo que acababa de suceder en la obra que tanto trabajo les había costado. Pero me sorprendieron. En vez de eso, alejándose del agua salieron corriendo, riendo tomados de la mano y volvieron a sentarse a construir otro castillo.

Me di cuenta que me habían enseñado una gran lección. Todas las cosas de nuestra vida, todas las estructuras complicadas sobre las que gastamos tanta energía y tiempo, están construidas sobre arena. Sólo nuestra relación con Dios y con otras personas perdurará. Tarde o temprano una ola puede llegar y tirar abajo lo que nos ha costado tanto construir. Cuando eso suceda solo los que tienen una Mano a la que aferrarse serán capaces de reír.